El ídolo de Boca reveló una anécdota que pocos sabían. También eligió su mejor gol y la mejor Libertadores.

Hugo Benjamín Ibarra, histórico número cuatro de Boca Juniors, nació en El Colorado, provincia de Mendoza, el 1 de abril de 1974. El exjugador surgió en las inferiores de Colón de Santa Fe e hizo su debut en primera en 1993. Jugó por cinco años en el Sabalero y arribó al club xeneize en 1998, con la llegada de Carlos Bianchi a la dirección técnica.
La historia de “El Negro” Ibarra en Boca es conocida, plagada de títulos y festejos, sin embargo, en diálogo con El Show de Boca, reveló que estuvo cerca de fichar para River Plate, el eterno rival del equipo de la Ribera.
“Antes de llegar al club me acuerdo que había un tire y afloje con River, por más que a muchos les cueste entenderlo hoy. Pero fue la verdad, River me quería“, confesó entre risas.
El lateral derecho dejó bien en claro su interés de vestir la Azul y Oro: “El presidente de Boca en ese momento, Mauricio Macri, hizo mucho para que yo pudiera llegar y cumplir mi sueño. Él convenció a Bianchi en el año 98, él dijo que me veía como un jugador que podía llevar esta camiseta, hizo la compra y mi sueño se hizo realidad. Fue un desafío grande para Boca porque River venía de ser campeón el año anterior, pero también lo fue para mí“
El histórico defensor disputó cuatro finales de Copa Libertadores, el máximo torneo a nivel continental, y las ganó todas (2000, 2001, 2003 y 2007). No obstante, el ex futbolista tiene preferencia por una en particular: “Me quedo con la primera Libertadores que gané, fue muy deseada después de muchos años, después el equipo del 2007 jugó con una diferencia muy grande por sobre el resto, de hecho no hay un equipo que haya ganado una final como la ganó Boca. Disfruté muchísimo de cada Copa que me tocó jugar, fue formidable haber ganado las cuatro“.
Por otro lado, también eligió el mejor gol que hizo vistiendo la camiseta de Boca: “El gol de zurda que le hice a River en la Bombonera va a ser el que siempre se va a recordar y el que más recuerdo yo. Me tocó la hermosa experiencia de abrir el marcador. Lo disfruto más que nada porque es muy difícil hacer un gol en un superclásico. Cualquier jugador de Boca que juegue contra River va a querer hacer un gol y yo lo hice“
Por último, hablo de su relación con Juan Román Riquelme: “Es un hermano que me dio la vida y siempre estoy agradecido por sus palabras, es una gran persona y ha sido un jugador formidable para todos los que amamos el fútbol. Él solo hace vibrar a todo un estadio, son muy pocos los tocados con una varita y él es un tocado por una varita». Y sentenció: «Creo que todos lo hicimos grande a Boca y a Román, no solamente los que corríamos por los costados como él dice. Nosotros pudimos disfrutar a Riquelme desde adentro de la cancha“.