Se cumplen 17 años de la de la eliminación de River Plate en la Copa Libertadores y del festejo de Carlos Tevez.
En el Estadio Antonio Vespucio Liberti, el 17 de junio de 2004, Boca Juniors y River Plate disputaban un partido por Copa Libertadores. Hinchada de ambos clubes, de cada lado, enfrentadas, como la historia de esta rivalidad lo confirma.
Boca sellaría su “Época dorada” de la mano de Carlos Bianchi, consiguiendo consagrarse victorioso tras los penales, dejando a River eliminado de la Copa Conmebol Libertadores de América.
Como buen superclásico, tuvo todos los condimentos posibles, hasta Boca sufrió por una expulsión. Pero la sabiduría del Virrey, la viveza de Carlos Tevez, la exactitud de los jugadores al patear, la concentración de Abbondanzieri para atajar cualquier pelota – inclusive el penal -, provocaron un silencio atroz en el Monumental y un festejo del “Apache” que jamás será olvidado: “la Gallinita”, aludiendo a los hinchas del conjunto de Núñez.